miércoles, 12 de noviembre de 2008

Esta mítica marca de motocicletas representa el espíritu norteamericano. Los mayores entusiastas de la carretera admiran las Harleys-Davidson. Esta compañía se ha ganado el reconocimiento mundial por fabricar motos con un estilo clásico, y unos acabados muy cuidados; sus motores son rústicos y para nada se acercan a los modelos japoneses, que con tecnología punta, lideran hoy día el mercado internacional.

La verdadera curiosidad de Harley-Davidson es que ha llegado a la cúspide de la pirámide no haciendo un producto mucho mejor que la competencia, sino creando un icono, una ideología, un mito. Mediante los años Harley se ha hecho un hueco en el cine, y en el estilo de vida americano, una moto que representa rebeldía, fuerza y libertad.

Este movimiento que se ha creado, ha permitido a la marca llevar a cabo concentraciones multitudinarias, formar club de socios y darse a conocer en el mundo entero, no como una simple moto, sino como una experiencia.. Además la compañía ofrece la oportunidad de crear la moto de tus sueños aplicando la personalización al modelo que se quiera adquirir, siguiendo las tendencias actuales de las empresas en cuanto a producción se refiere. También te permiten alquilar una moto, para que sientas lo que es conducir una Harley. Uno de los aspectos que los motoristas mas exigentes aprecian de estas motos es el ruido, aspecto que para algunos puede resultar absurdo, pero que para los seguidores de la marca resulta único e inconfundible.

Llevando a cabo esta política comercial han conseguido hacer que el cliente además de adquirir una moto, adquiera una pertenencia a un grupo, una de las necesidades humanas que no todos los productos de este mercado consiguen. Tener una Harley te convierte en un auténtico motero, la marca ofrece eventos a sus consumidores y los mantiene informados de las novedades, para no perder su imagen de comunidad, y esto los clientes lo agradecen.


Esta mítica moto norteamericana ha llegado a ser divinizada por muchos, y podríamos llegar a pensar que si la estatua de la libertad tuviera una moto sería una Harley-Davidson. En definitiva, han logrado ser los líderes en una cuota de mercado que engloba a un perfil de consumidores que buscan algo más que una moto, que buscan una experiencia.